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Collacios d'Uxo

Escalera al cielo.

Hola a todo el mundo del mundo.

Siguiendo con les vivencies que Vicente nos cuenta, me queda algo mas por añadir, y me explicaré de forma mas o menos breve.

Todos los días de esti confinamientu vemos noticies, tanto por la tele, como por la radio, como, incluso comentarios entre vecinos y amigos, también por foros y redes sociales, de ánimos y apoyo a todos los que están en la vanguardia de esta lucha sin cuartel que estamos librando contra el Covid-19. Salimos a los ocho de la tarde a aplaudir a la ventana; algunos nos amenizan con música desde sus balcones y ventanas, otros inventan juegos y chistes pa sobrellevar tantes hores valdíes. En fin, todo son signos de ánimos, calma y constancia contra este virus que nos intenta derrotar.

También salen a la palestra (con espíritu de lucha) muchísima gente altruista, pa colaborar en la medida que se pueda y aportar su granín de arena en esta despiadada lucha. Unos hacen mascarilles, otros ceden maquinaria y reorganizan su producción con miras a apoyar esta causa común. Otros ceden hoteles, apartamentos, casas, restaurantes para comidas sociales. También se hacen subastas on line para recaudar fondos destinados a esta lucha, se recortan sueldos, se cierran empresas, miles de personas al paro …

Pero, después de tantos días, tantas tardes y de tantas noches; aún no he oído hablar ni decir una sola palabra al CLERO.

¡¡¡DONDE ESTÁ EL CLERO!!!

Que yo sepa, y como bien dicen los letrados en derecho, “presuntamente”, nadie del CLERO ha salido a la palestra para ofrecerse voluntariamente y ayudar. Tantos bienes, tantas riquezas, tantas mansiones, tanta pompa y boato ¿dónde está?, ¿para qué sirve? ¿Para quién lo guardan?

Lo arreglan todo con video-misas , en iglesies vacíes. Comulgando con su propia imagen farisea y maniqueando a sus feligreses con la fé, la esperanza y la caridad.

¡¡¡Donde está esa caridad, esa humildad y esa entrega de la que tanto aducen!!!

También hay un gran despliegue de medios de casi todas las organizaciones altruistas, como Cruz Roja, Cáritas y otras ONG. Sí. Escuché testimonios de algún cura de parroquia pequeña, desviviéndose por sus feligreses y vecinos, haciéndoles servicios y recados, llevando el pan, medicinas y prestando apoyo logístico. Pero de estos, hay bien pocos.

Nadie sabe nada de la ayuda de los gerifaltes religiosos. Sólo algunos miembros de la tropa de a pie trabaja y con dificultades. En su jerarquía interna, desde el cura de parroquia hasta el papa, pasando por los consagrados, obispos, arzobispos, primados, patriarcas y cardenales, están desaparecidos del mapa.

Ya. Claro está. Siguen a rajatabla su confinamiento especial en sus mansiones y residencias preparadas para ser “cárceles de oro”. No comparten porque igual se contaminan y han de seguir las reglas del juego.

¿Por qué no ceden sus posesiones para albergar enfermos, o para dar alojamiento a los sanitarios y a todos los que luchan en primera línea de fuego y que realmente lo necesitan?. ¿Por qué no hay donativos para los pobres y para los sin techo?

Ya lo sé, estaréis pensando lo mismo que yo. Para eso ya están los organismos públicos cediendo polideportivos y edificios feriales que se mantienen con los impuestos de todos los españoles.

Ye una verdadera lástima que quienes dicen tener a dios de su parte, no lu compartan con los demás y lu guarden sólo pa ellos.

Si en estos días que faltan pa terminar el confinamiento, no se muestran al mundo, se disculpan por los días perdidos y no se hacen acreedores de su propia doctrina … entonces ye pa deciyos a la cara:

 ¡EGOISTAS!  ¡TRÁGALAS!  ¡ZAHERIDORES!  ¡FARISEOS!  ¡HIPÓCRITAS!

 Y no sería pa menos. Espero que cuando se levante “la veda” y los habituales a la religión vuelvan por sus derroteros antiguos, se acuerden de que la figura con sotana, túnica, o hábito que tienen frente a ellos, bien en una capilla, iglesia, catedral o basílica, sea una imagen real y que no se trate de algo fantasmagórico o de alguna reminiscencia del pasado reciente.

Son muy hábiles y capaces como para retorcer la historia y poner a los últimos los primeros y viceversa.

 En fin, collacios. Al principio dios creó la luz y la luz fue hecha. Es decir, primero fue la gran explosión y luego todo lo demás. A partir de 2020 (año bisiestu y siniestru) será el corona virus y después lo que venga, que ya lo veremos si esi dios lo quier.

 Pongamos una escalera hasta el cielo, para subir lo mas alto posible y si esi dios existe, nos pueda escuchar sin que nos oigan los intermediarios.

 Hasta luego.

4 comentarios

JORGE -

Leer esti artículo. Casi que na la broma.

https://elpais.com/ccaa/2020/02/25/madrid/1582653093_340290.html

Jose -

... y el pibe paseando pol Vaticano con cara circunstancies ...

JORGE -

Pues sí. Unu de ellos, de los curas de la calle, ye D. Luis. Seguro que ye la excepción que confirma la regla.
No soy religiosu, pero esi paisanu siempre me cayó muy bien. Ye paisanu antes que cura.

Vicente -

Los jerifaltes de la Iglesia siempre vivieron en el lujo y la opulencia.
Pero igual hay un sector de ellos como misioneros, educadores y curas de pueblos que si están cerca del pueblo.
Y hablo por el de Ujo que tol pueblu lu aprecia por su humildad y ayuda a los necesitados, si lleva 50 años en Ujo creo que lu vi siempre con les mismes sandalias y la misma ropa.
Por lo demás tienes mucha razón.